El akhasa es una palabra del sanscrito que quiere decir éter. El éter es comúnmente conocido por ser aquel volumen existente en el espacio entre la materia. Este volumen tiene la propiedad de recoger en forma de vibraciones de luz toda aquella actividad de todo lo existente desde el origen del Universo. Esto incluye las acciones y pensamientos de todos los seres humanos.
Por ello al conectar con nuestros registros akhasicos podemos obtener información sobre el por qué de los problemas que podemos estar experimentando. Y al hacernos conscientes de ellos podemos modificar nuestro comportamiento y lograr sanarlos (por ejemplo los patrones repetitivos y los bloqueos). Además también puede aligerar el karma acumulado.
La conexión con los registros también ofrece sanación física puesto que el contacto con las energías de amor de esa sexta dimensión produce el alivio de la mente y el alma y traen curación al cuerpo físico si es que lo necesitara.
También nos ayuda en nuestro desarrollo espiritual porque nos puede enseñar a comprender cuál es nuestro propósito de vida.